El papa Francisco pidió este sábado que la asistencia a los ancianos respete su dignidad, identidad y necesidades, en el discurso que dirigió a los participantes en la Conferencia Internacional promovida por el Pontificio Consejo para los agentes sanitarios que se ha celebrado en estos días.
«Es importante el apoyo de ayudas y de servicios adecuados, con el objetivo de respetar la dignidad, la identidad y las necesidades del paciente, pero también de los que asisten al enfermo, familiares y agentes profesionales», afirmó el pontífice argentino.
Por ello, agregó, es necesario que el modelo biomédico tradicional «se enriquezca de espacios de dignidad y de libertad, lejos de la cerrazón y del silencio que muy a menudo rodean a las personas asistidas».
Este encuentro sirvió al papa para reiterar el mensaje que ha lanzado en varias ocasiones sobre la importancia en la sociedad de los ancianos.
«Las personas mayores siempre han sido protagonistas en la Iglesia, y todavía lo son. Y hoy, más que nunca, la Iglesia debe dar ejemplo a toda la sociedad del hecho de que los ancianos, a pesar de los achaques inevitables, a veces graves, son siempre importantes, es más, son de hecho indispensables», dijo.
La conferencia internacional celebrada estos días llevaba el título de «Iglesia al servicio de los enfermos de edad avanzada: la atención a las personas que padecen enfermedades neurodegenerativas».
EFE