Los astrónomos vivirán este jueves uno de los momentos más esperados del año: el encuentro entre el cometa ISON y el sol.
Y este encuentro será crucial, porque el calor de nuestro astro rey puede acabar con la vida de este cometa o, por el contrario, puede convertirlo en uno de los más brillantes de la historia.
Si sobrevive a su encuentro con el sol, el ISON pasará cerca de la Tierra durante el mes de Diciembre y astrónomos de todo el mundo podrán analizar con mucha precisión las características de un cometa que contiene la materia prístina de los inicios del Sistema Solar.
En concreto, los científicos creen que el ISON proviene directamente de la nube de Oort, situada en los límites del Sistema Solar, donde abundan los cuerpos helados. Por alguna razón, este cometa fue expulsado de la nube hacia el corazón de nuestro sistema debido a la intensa atracción gravitacional del Sol. Además, el cometa ISON aumenta su velocidad a medida que se acerca a nuestra estrella, ha apuntado también la NASA.
En cuanto a su posible paso cerca de la Tierra, la NASA confirma que la distancia más cercana será de unos 64,3 millones de kilómetros, menos de la mitad de la distancia entre la Tierra y el Sol, y se producirá un día después de Navidad. Después el ISON seguirá su viaje en dirección contraria y se perderá para siempre.