La Policía ha detenido a nueve personas como presuntos responsables de la explosión de un oleoducto en la ciudad costera de Qingdao el pasado viernes, que causó 55 muertos, 9 desaparecidos y alrededor de 145 heridos.
Una investigación preliminar del Consejo de Estado consideró que la explosión se debió a un «error humano» y citó como posibles razones «una mala planificación urbana, un pobre mantenimiento del oleoducto y una respuesta inadecuada».