El Congreso General de la Nación Libia ha aprobado convertir la sharia (ley islámica) en base de toda la legislación y para todas las instituciones del Estado. Algunos analistas creen que la medida no dará resultado y que el país seguirá en el caos.
A partir de ahora un comité especial revisará todas las normas vigentes para comprobar si se adecúan a la sharia. La decisión entró en vigor de inmediato y se produjo poco antes de que se votara la formación de una comisión para redactar la nueva constitución Libia. Tras el reconocimiento de la ley islámica es de esperar que esta tenga un peso significativo en la carta magna.
El secretario de la Federación Musulmana de España, Yusuf Fernández, ve en esto un intento del Gobierno de ceder ante las milicias que reinan en el país después del derrocamiento de Muammar Gaddafi para que «moderen su mensaje» o al menos «no ataquen al Gobierno libio como lo están haciendo hasta ahora».
Fernández sostiene que «las medidas resultarán insuficientes» si el Gobierno libio no está dispuesto a ceder contra reivindicaciones de otro tipo como «entregar el control de recursos petrolíferos o integrarlas de alguna manera en el aparato de poder». «Las milicias no solamente están exigiendo temas de tipo ideológico, sino que también están reclamando un control efectivo sobre los recursos económicos del país», comenta el experto en declaraciones a RT.
«Esta medida no va a dar resultado y Libia va a seguir como hasta ahora, es decir, en el estado caótico en el que lleva desde que la OTAN intervino y destruyó de forma ilegal el régimen de Gaddafi», sentencia.
‘Sharia al Islamiya’, que significa ‘senda del Islam’ en árabe, es en el derecho islámico, un código detallado de conducta que incluye normas relativas a los modos del culto y a criterios de la moral, como las reglas que diferencian el bien y el mal.