Una mujer italiana emprendió una viaje de trabajo a Inglaterra durante un período de 2 semanas. Fue en este transcurso de tiempo donde fue ingresada de emergencia al hospital y fue ahí donde le extrajeron al bebé por cesárea y se lo llevaron los trabajadores sociales.
Luego ella sufrió un ataque de pánico cuando no pudo encontrar los pasaportes de sus dos hijas, que estaban alojadas con su madre en Italia. Al parecer, al momento que la ingresaron de emergencia al hospital no fue por la razón de dar a luz, sino porque tenía una condición de «bipolar severa» y no había tomado su medicamento. El hospital en realidad era un psiquiátrico.
Se afirma que servicios sociales de Essex obtuvieron una orden del Tribunal Superior para practicarle una cesárea. Más tarde se enteró que el juez de la Suprema Corte, había dado permiso a los trabajadores sociales para hacer arreglos para que el niño fuera entregado.
La mujer fue escoltada de regreso a Italia sin su bebé. Ahora la mujer ha reanudado su tratamiento, y está en una lucha legal para obtener a su hija. El Tribunal Superior de Justicia de Roma ha expresado su indignación por el trato que se le ha dado a una ciudadana italiana. Además jamás se debió forzar una cesárea.
Agencias