Según un grupo de científicos en Australia, la clave para conocer como controlar la obesidad y la diabetes, es a través de una especie de reloj neural, que es el que funciona para reducir el apetito durante la noche.
Los científicos realizaron las investigaciones con un grupo de ratones, en donde midieron la actividad de los nervios cuando las paredes del estómago estaban estiradas en intervalos de tres horas entre las 6 de la mañana a las 3 de la madrugada del día siguiente.
Así descubrieron que los nervios eran menos sensibles al estiramiento del estómago cuando los ratones estaban normalmente despiertos, mientras que éstos eran más sensibles cuando los animales estaban dormidos, lo que permitía que el cerebro recibiera la sensación de estar lleno más rápido, aplacando las ganas de comer.
Stephen Kentish, quien es el que lidera este grupo de investigadores, y sus compañeros sostienen que este mismo mecanismo se da en los seres humanos y esperan poder vincular los resultados de su investigación al entendimiento de los hábitos alimenticios de las personas que han sufrido variaciones en sus relojes circadianos.
«Sabemos que las condiciones metabólicas como la obesidad y la diabetes son más prevalentes en los trabajadores con diversos turnos y en la gente que no tiene un ciclo consistente de luz y oscuridad», subrayó el científico.
Agencias