Piensas que enjuagar tu cepillo de dientes es suficiente para volver a usarlo? Con el uso diario, los cepillos de dientes acumulan residuos de pasta dental y de nuestra boca en las cerdas. El no quitarlos favorece la aparición de bacterias que luego llevamos a la boca y que son perjudiciales para nuestra salud. Por eso hoy te explicamos cómo desinfectar un cepillo de dientes de la forma correcta.
Formas de desinfectar un cepillo de dientes
Agua caliente y vinagre
Después de usar tu cepillo de dientes, enjuágalo muy bien bajo un chorro de agua caliente. A continuación toma un poco de vinagre blanco y colócalo sin diluir en un vaso o recipiente. Coloca tu cepillo en el vinagre para matar las bacterias que se encuentran en él, además de eliminar el sarro.
Procura que todas las cerdas de tu cepillo estén perfectamente cubiertas por el vinagre. Déjalo reposar por 2 horas, luego enjuágalo muy bien con agua fría hasta eliminar el vinagre y que las cerdas se endurezcan otra vez. Déjalo secar con las cerdas hacia arriba.
Vinagre y bicarbonato de sodio
Enjuaga muy bien tu cepillo con agua limpia y elimina la mayor cantidad posible de residuos que tenga. Vierte ½ taza o 120 mililitros de agua en un vaso, agrega dos cucharadas de vinagre blanco y 2 cucharadas de bicarbonato de sodio. Mezcla muy bien los ingredientes y coloca tu cepillo en la solución para desinfectarlo. Déjalo reposar por media hora.
Concluido el tiempo de reposo, enjuaga tu cepillo con un chorro de agua fría y así evitaras que las cerdas se ablanden. Tu cepillo de dientes desinfectado ya está pronto para volver a utilizar.
Enjuague bucal
Después de enjuagar muy bien tu cepillo para dientes y quitar toda la suciedad posible, ponlo a remojar en enjuague bucal por 1 hora. Esto matará las bacterias que hay en él y le dará la oportunidad de necesitar menos lavadas.
Puedes hacer esto cada 4 o 7 días para desinfectar el cepillo de dientes, evitar suciedades y acumulación de residuos bucales.
Bicarbonato de sodio y alcohol
Toma tu cepillo, enjuágalo muy bien con agua y colócalo en medio vaso de agua con 1 cucharada de bicarbonato de sodio. Deja actuar por 30 minutos y enjuágalo nuevamente con agua.
En otro recipiente coloca un poco de alcohol y deja tu cepillo boca abajo en él; asegúrate que todas las cerdas estén bien cubiertas. Déjalo reposar por 15 minutos. Cumplido el tiempo, enjuágalo bien nuevamente en agua fría. Así tendrás un cepillo de dientes desinfectado que estará listo para usarse.
Agua hirviendo
Coloca tu cepillo bajo un chorro de agua hirviendo por 2 minutos, o déjalo reposando boca abajo en un embace con agua hirviendo. Después enjuágalo muy bien con agua fría para que las cerdas del cepillo recuperen su estado. De esta manera tendrás un cepillo de dientes limpio y desinfectado.
Mantener los productos de aseo personal en buen estado contribuye a cuidar nuestra salud. No olvides lavar, enjuagar y desinfectar tu cepillo de dientes, y el de cada miembro de la familia.