El Gobierno y la comunidad indígena de Panamá llegaron a un acuerdo para retomar un programa de la ONU contra el cambio climático y la deforestación, paralizado desde marzo por las denuncias de la Coordinación Nacional de Pueblos Indígenas de Panamá (Coonapid) al no tomársele según ellos en cuenta al momento de su creación.
Según esta organización, el programa no reconocía su derecho a determinar lo que sucede con sus bosques y a detener los proyectos en sus territorios, que ponen en peligro sus tradiciones y medios de vida.
Las dos partes, junto con las Naciones Unidas, aprobaron el martes la resolución de la iniciativa en la 11ª reunión de la junta del programa UN-REDD, que ha tenido lugar en Ginebra esta semana.