El expresidente de Colombia Álvaro Uribe ha admitido el miércoles que la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. (CIA) proporcionó ayuda secreta durante su gobierno que permitió a las fuerzas colombianas eliminar a varios líderes de las FARC.
Según informa el periódico colombiano ‘El Universal’, el expresidente, que gobernó el país latinoamericano entre 2002 y 2010, escribió en su cuenta de Twitter, que «EE.UU. ayudó [a Colombia] a detectar la ubicación de los jefes guerrilleros», pero especificó que esos operativos militares se desarrollaron con hombres y equipos colombianos. Uribe también reconoció que las operaciones militares se realizaron bajo su responsabilidad.
El pasado 22 de diciembre el periódico ‘The Washington Post’ reveló que desde el año 2000 Colombia recibe ayuda secreta del Gobierno de EE.UU., incluyendo un programa de acción encubierta realizado por la CIA durante el cual las fuerzas colombianas lograron eliminar al menos a dos docenas de líderes rebeldes y el espionaje intensivo de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés).
Según las revelaciones del periódico, los agentes estadounidenses supuestamente poseían una unidad de inteligencia instalada en la embajada de EE.UU. en Bogotá que detectaba, a través de información obtenida vía satélite, la ubicación de los campamentos guerrilleros. Los datos conseguidos se compartían con las autoridades colombianas.
Uno de los ataques militares más importantes del programa revelado por el periódico se llevó a cabo en el año 2008 contra un campamento de las FARC ubicado a pocos metros de la frontera entre Ecuador y Colombia en el que murió el número dos de la guerrilla, Raúl Reyes.
En respuesta a la publicación de esta información el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, calificó de «gravísimo» el apoyo que prestó la CIA a las fuerzas colombianas en el ataque y opinó que su revelación precisamente en estos momentos podría estar destinada a socavar el proceso de paz que están negociando actualmente las Farc y el Gobierno.