Los libros pueden infectarse de plagas de insectos por muchos motivos, guardarlos en un lugar húmedo, no limpiarlos con frecuencia o dejarlos en un lugar donde pueda haber polillas. No importa cuál sea la plaga que tengan nuestros libros viejos, hay que tener más cuidado con ellos porque con el pasar de los años son más delicados, tienden a deshojarse y romperse más rápido. Para evitar que esto le pase a tus libros, mira estos consejos para eliminar plagas de libros viejos.
Cómo eliminar plagas en los libros viejos
Ponte en las manos unos guantes de limpieza y luego toma el libro, teniendo cuidado de los insectos no se caigan al suelo.
Coloca una bolsa de plástico o un hule grande en una mesa donde puedas manejar fácilmente el libro y ver si los insectos salen de él.
Toma el tubo de la aspiradora y teniendo cuidado de no romper las hojas pásalo por todas partes alrededor del libro. Después comienza por los laterales donde se unen las hojas y aspira todo el polvo y los insectos que puedas.
En una olla coloca agua hirviendo y con una brocha ve quitando todos lo huevecillos e insectos que veas que hay en el libro.
En otro recipiente coloca una parte de cloro o lejía por 5 de agua, toma un paño seco y humedécelo en la mezcla de agua con cloro. Cuida que apenas este humedecido, ya que si el paño que usas para limpiar el libro tiene mucha agua podrías maltratar las hojas.
Con el libro cerrado, ve limpiando los bordes de las páginas. El cloro o la legía eliminarán los gérmenes y bacterias, además de los huevecillos restantes.
Toma un secador de mano con el aire más caliente y pásalo por todas partes del libro por un largo rato, preferente mente por 1 hora. Esto es con el fin de que todos los insectos y huevecillos que quedan en el libro se mueran.
Si no cuentas con un secador de mano, precalienta tu horno a 65°C y deja el libro en el horno por media hora.
Una vez que pase el tiempo, retira el libro del horno y deja que se enfrié.
Para evitar otro brote de plagas en los libros, cuida muy bien que en el estante en donde los pongas no haya insectos. Lo más probable es que si tus libros ya se infectaron, otras partes de tu casa lo estén también.
Consejos para cuidar un libro
Aspira tu librero periódicamente para que los insectos no hagan sus nidos allí.
Una vez que esté bien limpio el lugar donde piensas poner el libro, asegúrate de que al poner los libros tengan la tapa hacia afuera.
Evitar poner los libros en lugares húmedos porque las hojas se pueden arrugar o la tinta correrse.
Para que no se raspen las tapas de los libros. No coloques los libros hasta el fondo del estante, deja una separación de unos centímetros.
Al leer el libro viejo no tomes bruscamente las hojas con los dedos porque las puedes desgarrar, tómalas de una en una.
Cuando leas un libro viejo no dobles las tapas, deja el libro abierto de ambos lados.
Mantener un libro viejo limpio y en buen estado es fácil si sabes dónde guardarlo y cómo cuidar de él. Por eso es importante que si notas que hay algún insecto en él, limpies de inmediato la zona donde lo pones y también el libro.