Según una investigación reciente de la Unidad de Consejos de Investigación Médica Lifecourse Epidemiológica (MRC LEU) de la Universidad de Southampton en Inglaterra, se demostró que los niños cuyas madres consumen una alta cantidad de vitamina D, pueden ser más propensos a tener una mayor masa muscular y mayor fuerza.
La investigación publicada en la edición de enero del ‘Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism’ ha medido los niveles de vitamina D en 678 madres en las últimas etapas del embarazo y, posteriormente, se midió la fuerza muscular en los niños.
Cuando los niños tenían cuatro años, se midió la fuerza de apretón y la masa del músculo. Los resultados mostraron que a más alto nivel de vitamina D en la madre mayor era la fuerza de apretón del niño, aunque menos pronunciada era la relación con la masa muscular.
«Estas asociaciones entre la vitamina D materna y la fuerza muscular de la descendencia podrían tener consecuencias para la salud más adelante», explica el investigador principal, el doctor Nicholas Harvey, quien recuerda que la fuerza muscular en la edad adulta ha sido asociada a problemas de salud como la diabetes, caídas y fracturas.