PARIS (AP) Un escándalo sexual es lo último que le faltaba al presidente francés Francois Hollande. De por sí tres cuartas partes de los franceses creen que Hollande no tiene un buen desempeño al frente a la quinta economía más grande del mundo.
Ahora la conferencia de prensa del martes de Hollande con seguridad será empañada con los problemas de su vida privada tan incómodos que incluso no pueden pasar desapercibidos para los franceses, aun con la consabida indiferencia de éstos ante este tipo de situaciones.
La compañera de Hollande, la periodista Valerie Trierweiler, está hospitalizada debido al artículo que difundió un periódico sensacionalista de que el presidente tiene un amorío con una conocida actriz francesa.
Trierweiler podría permanecer de seis a ocho días en el hospital para que se recupere de la «fuerte conmoción emocional», dijo el lunes el jefe del personal de ella.
Hollande ha sido un solterón toda su vida, aunque tiene cuatro hijos con la ex candidata presidencial Segolene Royal. Hollande y Trierweiler han vivido juntos desde 2007 y aunque no están casados, ella ocupa la llamada «ala de la señora» en el palacio presidencial, acompaña a Hollande al exterior y se desempeña como la primera dama.
En un principio, la ciudadanía francesa no daba importancia al amorío secreto de Hollande y consideraba que eso era un asunto exclusivo de la vida privada de él. Sin embargo, encuestadores dijeron el lunes que el escándalo adquiere más seriedad por la hospitalización de Trierweiler y posiblemente tendrá más repercusiones negativas en la de por sí baja popularidad del mandatario.
«Ya hoy tenemos una víctima en la persona de Valerie. Esto podría aumentar la empatía hacia Valerie y perjudicar la imagen de Hollande, a quien podría percibirse como la causa de la tristeza de Valerie», dijo Yves-Marie Cann, de la agencia encuestadora CSDA.
«Esto podría pesar en la imagen que ha tenido Hollande de alguien agradable y honesto», apuntó.
Patrice Biancone, jefe de personal de Trierweiler, negó vigorosamente los rumores que circulan en internet de que ella intentó suicidarse y afirmó que ella simplemente necesita descanso.
Cuando se le preguntó sobre los planes de Trierweiler, él dijo a The Associated Press: «Cuando alquien está en una situación como esta, no puede pensar en el mañana, tiene que pensar con lucidez».
La coyuntura actual incrementa la presión en Hollande para que presente una nueva política económica convincente en la conferencia de prensa del martes con motivo del año nuevo.
Aunque los franceses a menudo dicen que no les interesa la vida privada de sus gobernantes, los lectores agotaron rápidamente la revista Closer que difundió la semana pasada imágenes de lo que dijo era Hollande que llevaba un casco puesto durante la visita en secreto a la actriz Julie Gayet.
Hollande amenazó con adoptar medidas judiciales debido a lo que describió como una invasión a su vida privada y Gayet no ha efectuado declaraciones en público.
Los electores franceses están «intrigados e interesados, pero no quieren que la situación distraiga a Hollande de los verdaderos problemas como el empleo y el déficit», dijo Emmanuel Riviere, de la agencia encuestadora TNS-Sofres.