LA HABANA (AP) Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia propusieron el martes un plan para la sustitución de los cultivos ilícitos, según los rebeldes un tema crucial para el avance de las conversaciones de paz que adelantan con el gobierno colombiano.
Para la puesta en marcha del programa «se hace necesario la desmilitarización de los territorios y su consecuente exclusión de zonas de guerra… pues se requiere la provisión de garantías y condiciones de seguridad para la población campesina», expresó Pablo Catatumbo.
Jorge Torres, alias Pablo Catatumbo, leyó un comunicado antes de una sesión de trabajo en el marco de las conversaciones que el gobierno colombiano y las FARC mantienen desde fines de 2012 en la capital cubana para poner fin al conflicto armado colombiano que lleva medio siglo.
Hasta la fecha las partes firmaron acuerdos parciales en los temas de la tierra y la participación política, dos de los seis puntos pactados en una agenda previamente acordada. En la actualidad debaten el combate al narcotráfico y los cultivos ilícitos.
Para las FARC el programa supone «la suspensión de las aspersiones aéreas con agentes químicos y la erradicación forzada de cultivos», señaló Catatumbo.
Los rebeldes indicaron que la financiación de dicho programa «correrá en su totalidad por cuenta del Estado. Para tal efecto se conformará un Fondo Nacional».
Por otra parte, Catatumbo expresó que se llevará a cabo en concertación con la comunidad y para eso se conformarán asambleas y concejos comunitarios o territoriales así como un Consejo Nacional, todos integrados por representantes del gobierno a nivel municipal y por las FARC, entre otros.
Otro aspecto relevante para el guerrillero es que se requiere «la suspensión de explotaciones mineras o de hidrocarburos en los territorios objetos de esta iniciativa».
Las FARC también propusieron la conformación de una «Veeduría Internacional de Seguimiento y Control del Programa» que estaría integrada por representantes de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) y de la UNASUR, además de autoridades locales.
Los representantes del gobierno colombiano encabezados por Humberto De La Calle no hicieron declaraciones antes de entrar a la sala de reunión.
Cuba, Noruega, Chile y Venezuela son países facilitadores de la mesa que podría desactivar el conflicto armado interno en Colombia.
Creadas en la décadas de los 60, las FARC tienen unos 9.000 hombres en armas.