En la propia entrada a la fortaleza El Coyotepe, cincuenta metros al norte, el cuerpo de una mujer que estaba siendo devorado por las aves de rapiña fue encontrado en estado de putrefacción por un agente encubierto que realizaba ejercicios.
El cuerpo de la mujer aun desconocida fue remitido al Instituto de Medicina Legal por las autoridades policiales. El hallazgo de la mujer, de unos 40 años de edad, de tez blanca y de 1.20 de estatura ha causado asombro y consternación.
Pablo Emilio Gutiérrez