Los socorristas de Irlanda del Norte tuvieron que atender la noche del jueves a unos sesenta jóvenes completamente borrachos o enfermos después de consumir drogas y alcohol a la entrada de un concierto en Belfast.
Dos jóvenes fueron descubiertos inconscientes y 14 necesitaron pasar por el hospital después de encontrarse mal antes de la actuación del DJ holandés Hardwell en el complejo Odyssey Arena de Belfast, según un ambulancista. El socorrista también describió a la televisión Sky News que numerosos jóvenes se encontraban indispuestos y algunos vomitaban.
Los casos más severos fueron tratados durante la noche en el hospital Royal Victoria and Mater, según el portavoz del hospital, que precisó que no peligraban vidas.
Según el portavoz de Odyssey, los jóvenes llegaron en un estado que requirió la intervención de los socorristas y no pudieron entrar en la sala. Espectáculo «horrible», según testigos que habían acudido a este espectáculo destinado a público de 16 a 18 años.
LONDRES, (AFP)