El presidente de Bolivia, Evo Morales, reveló este viernes que investiga el origen de su apellido occidentalizado y la procedencia étnica de su familia, que pertenecería al pueblo guerrero quechua de los Qaqachaca.
«Yo soy del ayllu (comunidad indígena) Sullca» y, consecuentemente, «soy (de la etnia) qaqachaca», dijo el gobernante, en una concentración pública en la región rural quechua de Qaqachaca, en el departamento de Oruro (oeste), donde promulgó una ley que definió los límites entre los ayllus de Oruro y Potosí, enfrentados durante años por tierras.
Morales nació el 29 de octubre de 1959 en la comarca de Orinoca, departamento de Oruro, pero su familia, que se dedicaba al pastoreo de llamas, un auquénido andino de carga, habría sido originaria de Qaqachaca.
Los temibles Qaqachaca mantuvieron durante casi una centuria sangrientas disputas esporádicas por linderos con los pueblos Laimes y Jucumanis, rivalidad que se mantuvo hasta hace unos años cuando lograron la paz a instancias de Morales.
«Mi primo hermano Román Morales Zenteno está investigando de dónde venimos los Morales y, de acuerdo a esa investigación, me dice que soy qaqachaca» del Norte de Potosí, dijo el mandatario.
También planteó: «A ver si pueden investigar de dónde viene la familia Morales, y por qué (se ha llamado) familia Morales, ese es otro debate que tenemos dentro de la familia», señaló.
Según una investigación publicada en Alemania en 2007 por el estudioso aymara Muruchi Poma, el verdadero nombre de Morales sería Ibo Katari Ayma.
La pesquisa afirma que hace cinco generaciones los antepasados de Morales se apellidaban Katari.
A causa de la discriminación, en el pasado muchos indígenas cambiaban su apellido para poder estudiar en las universidades o institutos militares o para ocupar cargos públicos en las ciudades.
El padre del primer vicepresidente indígena de Bolivia, Victor Hugo Cárdenas (1993-1997), por ejemplo, tuvo que cambiarse el apellido Choquehuanca original para poder estudiar en La Paz.
Como consecuencia de las fuertes expresiones racistas y discriminatorias, Hugo Banzer -que gobernó Bolivia de facto de 1971 a 1978, y luego de 1997 a 2001 como presidente electo- promulgó un decreto en 1975 para que los indígenas pudieran cambiarse de apellido.
LA PAZ, (AFP)