Vives atormentada por el miedo a equivocarte y te aterra exponerte al público. Cada vez que ingresas a una habitación, te escabulles al rincón más oscuro y cuando hablas, tu voz es apenas audible: tu autoestima está por el suelo. Ya no puedes seguir así, es hora de cambiar la percepción errónea que tienes de ti misma. Queremos ayudarte; por eso, te regalaremos algunos tips para mejorar la autoconfianza. ¿Preparada?
#1 Sé resiliente
La resiliencia es una de las mejores herramientas para superar el estrés, la ansiedad y cualquier tipo de adversidad. Supone, antes que nada, ser flexible y poder adaptarse a los cambios de circunstancias. ¿Las cosas no salieron como lo esperabas? Entonces, tómatelo con humor y sigue adelante -tu pesimismo no mejorará la situación. Por otro lado, la resiliencia también implica aceptar la propia imperfección. No eres perfecto -esto no es ninguna novedad. Por lo tanto, no esperes que tus acciones lo sean -y mucho menos, cuando intentas algo por primera vez.
#2 Sé optimista
No dejes que la sensatez se convierta en pesimismo. No confundas la precaución con la negatividad. Después de todo, si siempre esperas lo peor, será difícil que puedas mejorar tu autopercepción. Lo único que ganarás con esta postura es una vida corroída por el miedo y la desesperanza. ¿Es eso lo que en verdad quieres? Entonces, piensa en positivo: esto fortalecerá tu autoconfianza, te alentará a afrontar lo que sea y afianzará tus ganas de vivir.
#3 Prepárate
Siempre que estés por afrontar un desafío, prepárate. Trata de dormir bien y de comer sano; estos dos factores tienen una gran incidencia en nuestra capacidad de enfrentar cualquier reto y salir airoso. También, dedica tiempo a organizar todo lo que esté bajo tu control para cuando llegue el gran momento. Por ejemplo, si estás por tener una entrevista de trabajo, alista la ropa que vas a utilizar el día antes y averigua cuál es la mejor ruta para llegar. Este tipo de medidas pueden parecer nimiedades, pero si no se realizan con el tiempo debido pueden convertirse en verdaderos factores de estrés.
#4 Toma riesgos
Si tienes una autoconfianza débil, es probable que te hayas estancado en tu «zona cómoda». En ti, el miedo a fracasar es más fuerte. ¿Eres consciente de que este temor injustificado te está impidiendo alcanzar la mejor versión de ti misma?, ¿qué importa si fallas? Al menos, esto será una señal de que no estás quieta esperando a que la vida se te escurra entre las manos.
¡Vamos!, sigue estos tips y aprovecha este impulso para salir al encuentro de quien eres en verdad. Te sorprenderá descubrir lo que te aguarda tras los velos de miedo y desesperanza que ahora nublan tu mirada.