En los tribunales de tres estados de EE.UU., Nueva York, California y Míchigan, presentaron a la vez siete demandas contra McDonald’s por violaciones sistemáticas de la legislación laboral, incluyendo disminución ilegal de salarios.
En particular, en dos demandas presentadas en el estado de Míchigan, se afirma que en uno de los restaurantes de la cadena de comida rápida McDonald’s de la ciudad de Detroit los gerentes exigían a sus empleados que fueran a trabajar antes de la hora habitual y no pagaban las horas extra. Otro descontento de los empleados fue que se les descontaba del salario el tiempo para comer.
Es hora de que McDonald’s deje de violar la ley para aumentar sus ganancias
«Nosotros ya recibimos muy poco. Es hora de que McDonald’s deje de violar la ley para aumentar sus ganancias. Las horas extra que trabajamos deben ser pagadas», dijo una de los demandantes, Sharnell Grandberry.
Además, los empleados tenían que pagar por el cuidado del uniforme, lo que al final también repercutía en su salario: bajó al mínimo permitido por la ley de EE.UU., que es de 7,25 dólares por hora.
«Teniendo en cuenta que McDonald’s paga tan poco, el hecho de que obligen a los empleados a lavar por su cuenta los uniformes significa que su salario está por debajo del nivel legalmente permitido», según el abogado Jim Reef.
Según algunos informes, el salario promedio mensual de los empleados ordinarios de McDonald’s en EE.UU. es de 1.200 dólares. «Descubrimos varios esquemas criminales, pero todos tienen el mismo propósito: reducir los costos laborales mediante la reducción de sueldo de los empleados de McDonald’s», sostuvo Michael Rubin, abogado de un grupo de demandantes.