Apenas salía de un bar, en su primer día de pase, un joven miembro del ejército de Nicaragua de nombre Néstor Antonio Vásquez García, de 30 años, recibió dos estocadas mortales por parte de unos sujetos desconocidos, quienes le perforaron un pulmón sin que nadie se diera cuenta.
El ahora fallecido presentaba una herida en la vértebra y la profunda herida mortal de 8 centímetros longitud y 18cm de profundo, arriba de la tetilla izquierda.
Las autoridades policiales que investigan el crimen le entregaron el cadáver a un hermano de la víctima, quien pidió se esclarezca la muerte de su familiar.
Pablo Emilio Gutiérrez