Brasil considera prohibir el uso del glifosato, un componente activo del herbicida Roundup de Monsanto. Según un estudio reciente, el glifosato puede provocar una enfermedad renal grave que ha afectado regiones agrícolas pobres de todo el mundo.
La oficina del Ministerio Público Federal de Brasil también busca prohibir el uso del herbicida 2,4-D y otros siete ingredientes activos de los herbicidas: la parationa metílica, el lactofem, el forato, el carbofurano, la abamectina, el tiram y el paraquate, según informa su página web.
La entidad «pretende obligar a la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (ANVISA) a volver a evaluar la toxicidad de los ocho ingredientes activos sospechosos de perjudicar la salud humana y el medio ambiente». «Por otro lado, la agencia cuestiona el registro de plaguicidas que contienen herbicida 2,4-D, aplicado para combatir las malas hierbas de hoja ancha.»
Asimismo, el ministerio también solicita una medida preliminar que permita al Ministerio de Agricultura, Pecuaria y Abastecimiento suspender el uso de los ocho ingredientes hasta que la ANVISA llegue a una conclusión.
La semana pasada la Corte de Apelaciones Federal de Brasil dictaminó cancelar el uso del maíz genéticamente modificado Liberty Link de la empresa Bayer. A principios de este mes Francia prohibió la venta, el uso y el cultivo de maíz genéticamente modificado de Monsanto MON 810. Una nueva investigación encontró que en los Estados Unidos algunos insectos están desarrollando resistencia al maíz genéticamente modificado.