El financiamiento de EE.UU. en las iniciativas en América Latina ha disminuido en los últimos años, en particular en la cooperación conjunta sobre seguridad como, por ejemplo, contra el narcotráfico.
Ilan Berman, vicepresidente del Consejo de Política Exterior de EE.UU., dijo que el «vacío» en la región está siendo llenado por Rusia, Irán y China. «Hay un refrán ruso que dice que el lugar sagrado no permanece vacío por mucho tiempo», dijo Berman. «Esto es en gran medida el regreso a cómo los rusos, en otra época los soviéticos, utilizaban a América Latina».
El ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, anunció el mes pasado que el Kremlin está negociando establecer nuevas bases militares en ocho países, entre ellos Cuba, Venezuela y Nicaragua. Los sitios se podrían utilizar para repostar aviones de largo alcance de Rusia.
Por su parte, el representante por Arizona en el Congreso y presidente del subcomité de Relaciones Exteriores para el Hemisferio Occidental, Matt Salmon, dijo en una declaración inicial en la audiencia que la Administración carece de una «visión estratégica» para la región.
El acercamiento de China ha sido sobre todo económico, aunque también incluye la venta de armas a países del ALBA, así como entrenamientos y ejercicios militares conjuntos.
Un empresario chino con estrechos vínculos con el partido comunista de ese país ha recibido la aprobación para construir un canal en Nicaragua que costaría cerca de 60.000 millones de dólares y podría rivalizar con el Canal de Panamá.
Berman también criticó la declaración de Kerry el pasado otoño ante la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre que «la era de la Doctrina Monroe ha terminado». La doctrina, inicialmente diseñada como una advertencia contra la intervención europea en los países latinoamericanos recién independizados, guió más de 200 años de la política de EE.UU. hacia la región.
«Al hacer eso [Kerry] dio aviso a los regímenes regionales de que se les permite ganarse el favor de los actores externos y notificó a estos que Estados Unidos ya no competirá con ellos», dijo Berman.