¿Qué son las neurosis fóbicas? Puede que no tengas ni idea de por dónde va el asunto, pero si te digo que es algo bastante común, puede que entiendas que nos referimos al término médico para las fobias. Hoy te contamos un poco más sobre este tema, seguro que tú mismo o alguien cercano puede padecer una fobia.
¿Qué son las fobias?
Para que una neurosis fóbica sea diagnosticada, deben aparecer tres elementos: los síntomas (las fobias), las conductas de huida, y una personalidad fóbica. Existen varios tipos de fobias:
Que-son-las-neurosis-fobicas-2.jpgINGRAM PUBLISHING/THINKSTOCK
Las fobias simples que pueden ser miedos antiguos, que datan de la infancia, o las fobias a los animales, entre otros.
Las fobias sobre situaciones que conciernen al espacio, como la agorafobia (miedo a los espacios abiertos, espacios públicos, gente), la claustrofobia (miedo a los espacios cerrados, sensación de ahogo), la fobia a las alturas y la fobia a un medio de transporte preciso.
Las fobias sociales, que representan un miedo a encontrarse en una situación social en la que los demás lo observan o en la que nos sentimos humillados. Esta fobia reagrupa el miedo a hablar en público, el miedo a comer en público, el miedo a enrojecer en público, etc.
Las fobias llamadas «límites»: por ejemplo, la dismorfobia, que es una preocupación anormal con relación a la estética del cuerpo; o la nosofobia, que es el miedo a padecer una enfermedad grave.
Las fobias de impulsión, donde lo que domina es el miedo a producir un acto contra la propia voluntad, agresivo hacia uno mismo o hacia una tercera persona.
Cómo funcionan las fobias
Para disminuir la angustia, los enfermos gobiernan su vida estableciendo conductas contra fóbicas. En efecto, los fóbicos organizan su vida en función de sus fobias, evitando situaciones fobógenas. Por ejemplo, el agorafóbico renuncia a salir de casa. Una segunda solución para disminuir la angustia es la de adoptar una conducta que de seguridad: por ejemplo, utilizando un objeto o a una persona (contra fóbica), e implicarla de manera positiva, para luego conducirla a ciertos lugares angustiosos.
El último elemento que permite diagnosticar una fobia es la personalidad fóbica del enfermo. Esta se caracteriza por dos elementos distintivos: en primer lugar, el estado-conciencia de alerta la persona no soporta las situaciones imprevistas en las que percibe que un peligro puede llegar a ocurrir. Además, se alarma con todo aquello que emerge de su mundo interior.
En segundo lugar, la huida: el paciente, a pesar de la vigilancia que le caracteriza, huye ante el menor peligro. La huida se puede acompañar de un comportamiento pasivo (actitud de inhibición social), o de un comportamiento de desafío (huida hacia adelante, hacia el activismo).
En la personalidad fóbica existe un estilo de relación con un objeto en particular (atracción repulsión), hay una oscilación entre una falta de confianza en uno mismo, un sentimiento de plenitud y de momentos de ambición desmedidos.
La aparición de la neurosis fóbica ocurre normalmente en la adolescencia. Normalmente, se declara tras una angustia demasiado importante o una descompensación depresiva causada por un cambio brusco en la vida de la persona por ejemplo, la muerte de un padre.