Bruce Springsteen y la E Street Band volvieron a presentarse el sábado en el Festival New Orleans Jazz & Heritage, en lo que fue el espectáculo soñado de miles de aficionados, pero hubo quienes se quedaron con ganas de más.
Springsteen inició el su concierto de tres horas con «High Hopes», la canción que da título a su más reciente álbum.
Siguió con algunas de sus canciones más conocidas como «Hungry Heart», «Mary Don’t You Weep», «Wrecking Ball», «Tenth Avenue Freeze-Out», «Pay Me My Money Down» y una versión de la canción folk «Jesse James».
Springsteen recibió además un poco de ayuda de su esposa, Patti Scialfa, en la canción «When The Saints Go Marching In».
Springsteen sorprendió a los presentes al menos en tres ocasiones: visitó a quienes se encontraban en la parte más cercana al escenario, chocó palmas con admiradores y aceptó una cerveza de alguien que bebía ahí cerca.
El cantante se terminó la cerveza en unos minutos, recibió una ovación y después lanzó la lata vacía a la multitud que le aprobó el acto.
En otro momento, Springsteen jaló a alguien de entre el público y la subió a un escenario para que bailara con él «Dancing in the Dark».
El ex guitarrista de la banda Rage Against the Machine, Tom Morello, que ha estado tocando ocasionalmente con Springsteen desde el año pasado, cantó con él un dueto en «The Ghost of Tom Joad».
Poco después, el rockero John Fogerty lo acompañó en un par de canciones, entre estas «Proud Mary».
Springsteen cerró el concierto con su propia versión cantada de «Thunder Road». La del sábado fue la tercera actuación de Springsteen en el festival, que concluye el domingo después de dos fines de semana.
NUEVA ORLEANS, Luisiana, EE.UU. (AP)
