El gobierno boliviano anunció este jueves una operación policial de limpieza de pandillas y contra la delincuencia en Santa Cruz, una de las ciudades más inseguras del país, que albergará en junio la cumbre del G77+China.
«Vamos a hacer operativos especiales para ver este tema de las pandillas, el tema de organizaciones al delito o el seguimiento de gente que tiene antecedentes judiciales o policiales», declaró el ministro de Gobierno (Interior), Carlos Romero, a la radio estatal Patria Nueva.
El propio gobierno informó que en la próspera Santa Cruz hay unos 5.000 adolescentes y jóvenes en unas 180 pandillas.
El presidente Evo Morales reconoció la semana pasada que «hay una preocupación de la comunidad internacional con relación a la seguridad» que rodeará la cumbre en Santa Cruz, 900 km al este de La Paz, convertida hace dos décadas en centro de un intenso tráfico de droga.
En esa línea, Romero admitió que «Santa Cruz sufre un fenómeno de migración circulante, hay gente que ingresa y sale del territorio cruceño con mucha facilidad, por su amplitud de fronteras» con Brasil y Paraguay, por donde circula la droga y el contrabando.
Por esa razón, «vamos a tener 4.500 efectivos dedicados exclusivamente a la tarea de seguridad en Santa Cruz», en el marco de «un plan que está absolutamente muy bien trabajado» que será dado a conocer a las misiones diplomáticas que llegarán a la cumbre.
Además «se harán operativos en hoteles, en alojamientos, en restaurantes, en lugares de concentración pública», anticipó.
Bolivia ejerce la presidencia pro témpore del bloque que agrupa a 133 naciones emergentes+China y, en esa condición, será anfitrión de la cumbre llamada para conmemorar el 50 aniversario de la organización. Hasta ahora han confirmado su asistencia a la cita el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y los presidentes de Argentina, Cuba, Costa Rica, Ecuador y El Salvador, además de tres mandatarios africanos que el presidente Morales no identificó.
LA PAZ, (AFP)