Algo muy común en las familias con varios hijos son las constantes peleas entre hermanos, pero esto no debe de tomarse como algo normal. En un hogar debe de prevalecer la armonía, el respeto, la conversación, la tolerancia, etc. Para ello, como siempre, el ejemplo de los padres es fundamental. En esta entrega, te contamos cómo prevenir y evitar las peleas entre hermanos.
Una casa en la que los padres discuten delante de los hijos constantemente crea un ambiente propicio para que los hermanos también se peleen. Sin embargo, en una casa donde el padre y la madre jamás discuten frente a sus hijos y tienen detalles de cariño constantes entre ellos, difícilmente podrán encontrar hueco las peleas entre hermanos.
Aún así, debemos de considerar estas peleas como algo que seguramente va a suceder en algún momento, pero como padres debemos de buscar las causas para solucionar el problema y que no vuelva a pasar.
Los celos y envidias entre hermanos son causa de muchas peleas. Aunque pensemos que son cosas de niños, no olvidemos que por los mismos motivos los adultos van a la guerra y matan a personas, por lo que enseñar a los niños que hay otra forma de ver las cosas es importante mientras sean niños.
De esta forma nuestros hijos serán hombres y mujeres pacíficos que sabrán relacionarse con sus amigos y otras personas sin usar la violencia. Si un niño aprende que con violencia consigue lo que quiere de su hermano, podrá aplicar esto a otros casos fuera de casa.
Cómo prevenir las peleas entre hermanos
Como ya hemos comentado, el comportamiento agresivo de los padres puede ser modelo para los hijos y establecer así la regla de la pelea para conseguir lo que quieren, por lo tanto, la regla número uno es evitar discusiones y peleas entre padres y los padres con los hijos, por supuesto sin olvidar la aplicación de las normas de disciplina de la casa. Disciplina con cariño podríamos decir,.
Si los celos y las envidias pueden ser causa de peleas entre hermanos, los padres deben de valorar ante los demás y entre la familia por igual a cada uno de los hermanos sin realizar comparativas como, «¿porqué no puedes?, tu hermano si puede», o frases de este tipo. Ensalzar los valores de cada uno sin echar en cara sus defectos comparándolo con su hermano o hermana.
Pasar tiempo de juego o conversando por igual con los dos hermanos y también dedicar igualmente tiempo individual a cada uno de ellos. Mucho cuidado con los cariños a tus hijos cuando estén presentes los dos, que no se te olvide realizarlos a los dos y con la misma intensidad.
Como padres puedes dar funciones a ambos hermanos e intercambiarlas con el tiempo para que vean que son iguales de importantes en las cosas de la casa.
He aquí algunos ejemplos de como los padres deben de comportarse para evitar las peleas entre hermano.
Cómo evitar peleas entre hermanos
Por supuesto que si llega el momento de la pelea, los padres deben de separarlos para evitar que se hagan daño, sobre todo el más mayor y fuerte al más pequeño y esperar a que se calmen los ánimos. Para ello, la actitud de los padres debe de ser firme pero relajada, sin mostrar enfado o ira.
Con los dos niños sentados y en el momento en el que estén tanto el padre como la madre comienza el momento de la reunión familiar, momento en el que cada niño tendrá su turno de palabra sin interrupciones, esto es importante para que cuente que ha pasado. Aquí los padres deberán ejercer de jueces de mutuo acuerdo siempre y si hay algún desacuerdo, deberán de levantarse y hablarlo lejos de los hermanos hasta encontrar un acuerdo.
El final de esta reunión aunque lleve consecuencias para alguno de los hermanos o para los dos, debe de acabar cordialmente con la un beso o abrazo entre los hermanos para después poder realizar algún juego conjunto con los padres. Los hermanos deben de entender al final que ha habido justicia para no guardar ningún rencor entre los hermanos que más adelante derive en nuevas peleas.