Fallas hospitalarias en el control de infecciones exacerbaron un brote de una nueva enfermedad viral mortal que ha afectado a más de 60 personas y causó la muerte de al menos 10 en los Emiratos Árabes Unidos, dijeron el viernes investigadores de la salud.
No obstante, expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirmaron que tras una misión de cinco días al país no habían encontrado evidencias de transmisión sostenida entre humanos del nuevo coronavirus conocido como Síndrome Respiratorio de Oriente Medio (MERS-CoV, por su sigla en inglés).
«El reciente aumento de casos en Abu Dabi parece haber sido causado por una combinación de factores, incluyendo una falla en la prevención de infecciones y en medidas de control en ambientes de atención sanitaria, vigilancia activa e incremento en casos adquiridos en la comunidad», afirmaron los expertos de la OMS en un comunicado.
El MERS, reportado por primera vez en humanos en el 2012, provoca un malestar respiratorio severo, y a menudo fatal, con síntomas similares a los vistos durante el brote del síndrome respiratorio agudo severo (SARS, por su sigla en inglés) en el 2003.
Su tasa de mortalidad cercana al 40 por ciento y reportes de núcleos de transmisión entre humanos han provocado preocupaciones de que se convierta en una pandemia. Hasta el momento, el MERS ha infectado a más de 800 personas en todo el mundo y ha acabado con la vida de al menos 310.
La gran mayoría de los casos han tenido lugar en Arabia Saudita, pero también ha habido casos esporádicos y núcleos en Oriente Medio y Europa, Asia y Estados Unidos. El equipo de seis expertos de la OMS y de la Red Global de Alerta y Respuesta a Brotes fue invitado a los Emiratos Arabes Unidos para investigar el MERS tras un alza de casos en abril.
El grupo se reunió con expertos y autoridades sanitarias de Abu Dabi y visitaron el hospital vinculado con dos tercios de los casos del país, sostuvo, sin entregar el nombre ni la localidad del centro médico.
LONDRES (Reuters)