Santos asume el compromiso inmutable de llevar la paz a Colombia

Juan Manuel Santos se convirtió este domingo en el segundo Presidente reelecto de manera inmediata en Colombia, al vencer en segunda vuelta al candidato de la ultraderecha, Óscar Iván Zuluaga, con una diferencia superior a los 900 mil votos y un proyecto que antepone, a cualquier otro objetivo, la ansiada paz del pueblo colombiano.

Precisamente, la terminación de un conflicto armado que lleva más de medio siglo fue la carta principal de la campaña de Santos, al punto de recibir el respaldo de sectores de izquierda, sindicalistas, campesinos y jóvenes que, aunque no comparten varias de sus ideas, desean la paz y la reconciliación.

Este apoyo fue, indudablemente, el factor determinante en la victoria de Santos. Por ello, la excandidata presidencial del Polo Democrático (izquierda), Clara López, expresó que esta alianza «obliga a Santos a desarrollar un mandato social».

Ahora, Santos se encuentra con el reto de cumplir una promesa (la paz) que no depende enteramente de él, sino de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), con quien desarrolla los Diálogos de Paz en Cuba, y del Ejército de Liberación Nacional (ELN), cuyas conversaciones están en fase exploratoria.

Por otro lado, al margen de la paz, el Presidente deberá cumplir otras promesas que lanzó durante su campaña, todas de interés social, entre las que destaca la construcción de trescientas mil viviendas gratis, adicionales al millón que había prometido anteriormente.

Igualmente, se comprometió a restituir el pago de las horas extras a los empleados, establecer una jornada escolar única de ocho horas, mejorar los planes de seguridad nacional, solucionar el problema de agua potable que sufren varios municipios, adjudicar las llamadas Autopistas de la Prosperidad en Antioquia y recuperar la navegabilidad del río Magdalena.

El Mandatario, en el discurso del triunfo, manifestó su deseo de formar una «selección nacional de gobierno», para que en los próximos cuatro años «nadie se arrepienta de haber votado por nosotros».

«Gobernaré con el mayor respeto por mis adversarios políticos. De eso se trata la paz. No reconozco enemigos, no guardamos rencor y propongo que desterremos para siempre el odio y la violencia de nuestra democracia», enfatizó.

Por último, aprovechó el momento para enviar un mensaje a las FARC y al ELN, a cuyos integrantes invitó a trabajar juntos para «ponerle punto final al conflicto armado «con «seriedad y decisión».

Santos obtuvo la reelección con el 50,95 por ciento de los votos (siete millones 816 mil 986 votos), por encima de Zuluaga que sumó el 45 por ciento de los sufragios (seis millones 905 mil 001 votos).