Neurocirujanos bolivianos han logrado curar a una niña, de 6 años de edad, que no podía parar de reír. Por sus ataques inapropiados de risa, los vecinos consideraban a la niña como una «loca» e incluso «poseída por el diablo».
Al analizar imágenes de su cerebro, los médicos descubrieron que la niña tenía un hamartoma, un tumor que presionaba el lóbulo temporal. Como consecuencia de este tumor, la pequeña sufría epilepsia gelástica, que consiste en una forma de ataques epilépticos que se presentan en forma de risa.
Tras la cirugía, la niña se recupera normalmente, según el portal ecancer.org.
