Luis Enrique, nuevo técnico del Barcelona, sostiene que el equipo podrá cubrir la ausencia inicial de su nuevo refuerzo, el atacante uruguayo Luis Suárez, mientras cumple su castigo por morder a un oponente durante el Mundial de Brasil.
Luis Enrique dijo: «Es malo que no esté con nosotros desde el comienzo pero eso no es una tragedia. Alguien más jugará en su lugar».
Suárez está suspendido hasta octubre debido a la sanción de cuatro meses que se le impuso por morder al italiano Giorgio Chiellini durante el Mundial. La semana pasada el Liverpool de la liga Premier traspasó a Suárez al club catalán por 130 millones de dólares.
«Que Luis Suárez no entrene con nosotros por cuatro meses no altera nuestros planes porque siempre supimos que sería así», dijo Luis Enrique, quien no cree que la llegada de Suárez altere un sistema de ataque que ya incluye a Lionel Messi y Neymar: «Entre más jugadores grandes tienes, estás mejor».
Luis Enrique indicó que ha hablado con el mediocampista Xavi Hernández y dijo que el club espera la decisión del seleccionado español en torno a si continúa con el club o no.
Barcelona adquirió al croata Ivan Rakitic del Sevilla, a los arqueros Marc-Andre Ter Stegen y Claudio Bravo mientras Rafinha, Gerard Deulofeu y Bojan Krkic han regresado a la escuadra tras jugar a préstamo en otros. El mediocampista Cesc Fábregas fue vendido al Chelsea mientras el atacante Cristian Tello fue enviado al Porto mediante un préstamo el miércoles.
«Ningún equipo ha hecho tantos movimientos como nosotros en este verano. Queremos tener la escuadra más dinámica que sea posible», dijo el director deportivo Andoni Zubizarreta.
Zubizarreta desestimó los comentarios en el sentido de que Suárez, quien ha sido sancionado por diversos episodios de actitud antideportiva, fuera una figura incómoda para un club que enarbola altos valores morales.
«Aceptamos a las personas por lo que son, incluidas sus imperfecciones.Esto también forma parte de nuestros valores. Estoy seguro de que Luis Suárez será una referencia positiva para nosotros».
BARCELONA, ESPAÑA (AP)