Policía chino ejecutado por matar a tiros a embarazada

Un ex policía fue ejecutado hoy martes por matar a tiros a una mujer embarazada en la región autónoma de la etnia zhuang de Guangxi, en el sur de China.

El hombre, Hu Ping, que trabajaba en el departamento de seguridad pública del distrito de Pingnan, estaba borracho cuando, el 28 de octubre del año pasado, disparó a la mujer y a su marido, que regentaban un restaurante de fideos.

El marido, Cai Shiyong, resultó herido leve en el hombro derecho. Su esposa, Wu Ying, falleció tras recibir dos disparos y no fue posible salvar al feto.

Hu fue condenado a pena de muerte por homicidio intencionado el pasado febrero por el Tribunal Popular Intermedio de Guigang. Él recurrió la sentencia, pero el Tribunal Popular Superior de Guangxi confirmó el veredicto en abril y la pena de muerte fue aprobada por el Tribunal Popular Supremo.

El crimen de Hu causó una «influencia abominable en la sociedad», dijo el tribunal.

Las sentencias en el primer y segundo juicio se basaron en «hechos claros» y «evidencias válidas y adecuadas», por lo que «la condena fue precisa y la pena fue apropiada», según la misma fuente.

NANNING, (Xinhua)