En junio Facebook, la mayor red social del mundo, anunció la incorporación de la historia web de los usuarios en sus algoritmos de publicidad. Según Facebook, esto dará una publicidad más precisa, pero también surgen dudas en cuanto a la privacidad.
El argumento clave de los oponentes de la práctica de vigilar las actividades de los usuarios fuera de Facebook para ofrecer una publicidad más ‘eficaz’ es que el algoritmo debería analizar los sitios web que el usuario visitó antes de llegar a Facebook, aunque no tienen nada que ver con la red social.
Kostas Rossoglou y Jeffrey Chester, dos representantes del grupo Trans Atlantic Consumer Dialogue un organismo dedicado a armonizar las políticas europeas y estadounidenses en el dominio de los derechos de los consumidores enviaron una carta a la Comisión Federal de Comercio de EE.UU. (FTC, por sus siglas en inglés) y llamaron a una investigación de esta nueva práctica de Facebook desde el punto de vista de la privacidad de los usuarios, informa Bloomberg.
La carta subraya que el análisis de las actividades fuera de Facebook contradice un acuerdo vigente entre la FTC y Facebook firmado en 2011 tras una investigación de la falta de protección de la privacidad por parte de la red social.
La portavoz de Facebook, Jodi Seth, comentó en respuesta a estas alarmas que los usuarios tenían la posibilidad de excluir su historia web del algoritmo de publicidad. «El nivel de control que los usuarios ejercen sobre la publicidad que ven en Facebook supera los estándares de la industria», notó Seth.
Facebook fue criticado varias veces por sus políticas, incluyendo el dominio de la privacidad. En respuesta a la crítica, la empresa introdujo varios mecanismos destinados a ofrecer más posibilidades para configurar el perfil de privacidad de los usuarios y controlar qué datos de Facebook están disponibles para las programaciones desarrolladas por cualquier tercera parte.