Para festejar sus 45 años, la curvilínea Jennifer Lopez gastó alrededor de 100.000 dólares en una exclusiva cena que realizó en el restaurante griego Nammos Estiatorio, ubicado en Southampton, Nueva York.
La cantante y bailarina llegó a la reunión, en la que la esperaban familiares y amigos, enfundada en un conjunto de top y pantalón blanco que dejó al descubierto buena parte de su espléndida figura.
Si bien la artista se llevó todas las miradas, perdió parte del protagonismo cuando llegó el momento de soplar las velitas, ya que los asistentes quedaron por demás sorprendidos al ver la gigantesca torta realizada por la maestra pastelera Samantha Brooks, con una Jennifer en tamaño real acostada sobre un león.
AGENCIAS