Deshacer un matrimonio es muy difícil, sobre todo cuando resultan afectados los hijos. Conoce en este artículo algunos consejos para divorciarte sin destruir emocionalmente a tus hijos y así evitar cometer errores.
#1 Usar a tu hijo como mensajero
Es frecuente que como padres quieran comunicarse a través de sus hijos, pero esto solo causará estrés emocional en ellos. Si no puedes entablar una conversación mejor utiliza el correo electrónico o un mensaje grabado. Si es necesario habla en persona, pero no caigas en las provocaciones.
#2 Hacer de tus hijos su terapeuta
El divorcio vuelve el mundo de adolescentes totalmente al revés, no compartas con tus hijos los detalles del divorcio ni los sentimientos hacia tu ex, es cierto que pueden comprender la situación pero recuerda que ellos son tus hijos no tus padres. Si lo crees necesario busca ayuda profesional pero no conviertas a tus hijos en tus terapeutas porque les haces daño al colocarlos en un bando.
#3 Hablar mal de tu expareja
Los niños después de un divorcio pueden estar muy confundidos y si además empiezas a hablarle mal de tu ex les daña, les duele. Recuerda que lleva dentro de sí parte tuya y de tu expareja. Cuando ellos toquen el tema no aumentes las críticas. Tus hijos están heridos como tú y su medicina es una receta de mucho amor y comprensión, no de críticas.
#4 Mostrar celos o enojo cuando visitan la casa de su ex
Cuando tu hijo visite a tu ex cónyuge piensa y trátalo como si va a la casa de un tío o tía, no digas nada que pueda estresarlo y hacer que sientan que no son bienvenidos. Si colocan al niño en medio de los dos como un juez destruirán su salud emocional.
#5 No reconocer los errores como padres
Posiblemente has identificado algunos errores, los niños son muy inteligentes e indulgentes. Si crees que les has herido en este proceso de divorcio pídeles disculpas y cambia las conductas que les duelen, sobre todo hazlo para que no llegue a la adolescencia cargado de ira y resentimientos. Explica a tus hijos que no era tu intención herirlo s y pídeles ayuda para cambiar, por ejemplo diles que te apreten la mano cuando empieces a hablar mal de tu ex.
Ahora que conoces los errores que debes evitar, el divorcio será más llevadero para tus hijos y tú.
