El fuerte torrencial que cayó la noche del lunes en Chinandega dejó más de 20 casas sin techos en la Colonia Gracsa, Reparto 10 de Julio y otras comunidades aledañas. Los techos de zinc y nicalit volaron en cinco viviendas, otras veinte resultaron con daños parciales.
La tormenta se tornó con fuertes vientos y tormenta eléctrica, los afectados relacionaron el fenómeno a un tornado que botó árboles, postes y cables eléctricos a la altura del kilómetro 129 de la carretera León, Chinandega. «Era un fuerte viento que casi nos levanta por los aires, la casa quedó cubierta de agua y lodo. Nos sorprendió la lluvia luego se escuchó caer granizo acompañado del fuerte vendaval que se llevó el techo, los muebles quedaron quebrados y la mayoría de los electrodomésticos resultaron dañados», expresó Miriam García, del anexo 10 de Junio.
Este huracán levantó todas las hojas de zinc, la casa quedo «enclenque» a punto de desplomarse, y no tengo como levantarla, espero que las autoridades me apoyen para reconstruirla dijo Margarita Fletes. Tras la tormenta fueron reportadas otras afectaciones en casas y comunidades del municipio de Posoltega, y las comarcas orientales San Benito, Belén y la Bolsa. La alcaldesa Aura Lila Padilla realizó un recorrido en la zona para dar respuesta inmediata a las familias afectadas por la tormenta, además se conoció que representantes de INETER revisaban el sismógrafo y la cámara de scanner en las faldas del Volcán San Cristóbal.
Esta es la segunda tormenta que ha causado afectaciones en Chinandega durante la temporada de invierno como consecuencia del fenómeno del Niño. La primera tormenta ocurrió el 22 de Julio, una descarga eléctrica causó la muerte de un hombre de 26 años de edad cuando laboraba en campo abierto en el municipio de el Viejo.
Belkiss Medina