Danny García conservó su condición invicta el sábado, al noquear a Rod Salka a los 2:31 minutos del segundo asalto de una pelea en la que no estuvo en juego el título.
García (29-0) es el monarca superligero por el Consejo y la Asociación Mundial de Boxeo (CMB y AMB), pero ninguno de los dos organismos sancionó la pelea, pues Salka suele pelear en la categoría de los ligeros y no figura siquiera entre los 50 mejores púgiles de la división inmediata superior.
En su tercer combate en Brooklyn, García, estadounidense de ascendencia boricua, propinó una andanada de potentes golpes que enviaron a Salka dos veces a la lona. Tras un par de zurdazos de García, la esquina de Salka arrojó la toalla.
«Les dije a todos que esta noche verían el show de Danny García», dijo el triunfador. «Sin importar contra quién peleé esta noche, iba a ganar y pelearía a muerte».
García dominó el fugaz combate al acertar 50 de 117 puñetazos, el 43%. Salka (19-4) atinó 10 de 69, incluidos apenas dos de 42 jabs.
Fue la pelea más breve de García desde que derrotó a John Figueroa en el segundo round de una contienda realizada en febrero de 2011.
Se esperaba que García enfrentara a Lamont Peterson por la unificación del centro, y ambos púgiles habían manifestado que deseaban la pelea. Pero el manager de García, Al Haymon, prefirió postergar ese combate después de que su pupilo tuvo muchos problemas para conseguir un triunfo por decisión unánime sobre Mauricio Herrera en Puerto Rico, hace cinco meses.
Peterson (33-2-1) enfrentó a otro rival de poco renombre. Noqueó al neoyorquino Édgar Santana (29-5) a los 2:48 minutos del décimo asalto, para retener su título por la Federación Internacional de Boxeo (FIB).
En la primera de dos peleas por el título, en esta función realizada en el Barclays Center de Nueva York, Daniel Jacobs (28-1) se apoderó del cetro vacante de los medianos por la AMB, al noquear al australiano Jarrod Fletcher (18-1) a los 2:58 minutos del quinto asalto.
NUEVA YORK (AP)
