El 80 por ciento de los hombres europeos después de tener relaciones sexuales se quedan dormidos, de acuerdo a una reciente encuesta realizada en el continente, donde también el 48 por ciento de ellos confesaron haberse quedado dormidos durante el acto.
Esto tiene una explicación científica proporcionada por el neurocientífico Serge Stolerú quien escaneó el cerebro de hombres antes y después de tener un orgasmo. Después de mantener relaciones sexuales, el cerebro masculino segrega sustancias al torrente sanguíneo que producen el sueño: oxitocina y serotonina, afirma el científico francés en la revista Neuroscience and Biobehavioral Reviews.
Otras reacciones en el hombre son el relajamiento muscular, la dificultad de comunicación, no poder expresar lo que sintió o el alejamiento físico de la pareja; afirma el sexólogo Walter Ghedin.
A las mujeres no les pasa lo mismo que a los hombres, aunque hay un porcentaje que sí se queda dormida, según la Universidad de Michigan que también investigó que si ambos caen en un profundo sueño es que el amor es muy real, en especial para la persona que primero cierra los ojos, quien es la más enamorada, afirma el investigador Daniel Kruger.
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