La semana pasada EE.UU. y China intercambiaron pretensiones tras el acercamiento «peligroso» de un caza chino a un avión antisubmarino de EE.UU. Según los expertos, el Pentágono está preocupado por el crecimiento de las fuerzas submarinas de Pekín.
El Pentágono afirmó que el 19 de agosto un caza chino realizó maniobras cerca de un avión militar de EE.UU. al este de China y que las aeronaves llegaron a estar a unos nueve metros de distancia. Entonces el portavoz del Pentágono, John Kirby, calificó las maniobras de «bastante agresivas».
Poco después China intervino diciendo que lo que amenaza a la seguridad aérea y marítima en el Pacífico es «la vigilancia cercana, masiva y frecuente a China» por parte de EE.UU. Y en este contexto exhortó a la parte estadounidense a dejar de inspeccionar el territorio chino y propiciar una atmósfera favorable para los contactos militares bilaterales.
Como señala un artículo publicado en ‘The Wall Street Journal’, para algunos analistas es evidente que las patrullas estadounidenses continuarán en la zona, dado que el Ejército de EE.UU. está preocupado por la creciente inversión de China en los submarinos como parte de un programa amplio de modernización que ya incluye portaaviones y una creciente flota de buques de la Armada. Los militares de EE.UU. señalan que el plan de China consiste en aumentar su flota de submarinos hasta los 60 buques.
«El avance de China en capacidades submarinas es significativo. China posee una gran fuerza submarina y cada vez más capaz», dijo en marzo ante el Comité de Servicios Armados del Senado el almirante Samuel J. Locklear, comandante del Comando del Pacífico de la Marina de EE.UU.
Según el último informe anual del Departamento de Defensa leído ante el Congreso, China cuenta con tres submarinos de misiles balísticos de propulsión nuclear de clase Jin Tipo 094. «El submarino de misiles balísticos nucleares es el arma más peligrosa de la Tierra», advirtió a través de su informe preparado en junio el experto militar John Keller.
Por su parte los expertos chinos dicen que los encuentros «peligrosos» como el de la semana pasada no son nuevos ni terminarán, opinan. El experto militar de la Universidad de Shanghái de Ciencias Políticas Ni Lexiong subraya que Washington se siente amenazado por el deseo «normal y razonable» de China de construir una marina moderna. «Esta es una contradicción irreconciliable,» opina Ni Lexiong.