La policía salvadoreña capturó el viernes a siete personas que formaban parte de una estructura criminal dedicada a la trata de personas y a la explotación sexual de menores que ofrecían en diferentes lugares públicos de la capital. La Fiscalía General de la República informó que en las próximas horas esperan capturar a otras personas implicadas en el caso.
Según las investigaciones oficiales, la red de tratantes de menores operaba en centros comerciales del área metropolitana de San Salvador, donde reclutaban a jóvenes de entre 13 y 17 años ofreciéndoles convertirlas en modelos y que al final terminaban prostituyéndolas.
La jefa de la Unidad Especializada de Tráfico Ilegal y Trata de Personas de la Fiscalía, Esmirna de Calles, detalló que «las prácticas aberrantes» utilizadas por la banda, compuesta en su mayoría por mujeres, incluían «la venta de la virginidad de las víctimas» por la que cobraban a sus clientes hasta 300 dólares.
Las menores de edad eran llevadas a lugares públicos donde las entregaban a sus «clientes», quienes previamente habían detallado las características físicas y otros requisitos de las niñas y adolescentes requeridas.
La estructura criminal que era dirigida por David Armando Pérez Bonilla, de 22 años, estaba integrada en su mayoría por mujeres jóvenes que se encargaban de reclutar a las víctimas.
Los capturados serán procesados por los delitos de trata de personas agravada con la modalidad de explotación sexual. Las penas por este delito van de cuatro a ocho años de prisión que con agravantes pueden llegar a unos 13 años como máximo.
SAN SALVADOR, El Salvador (AP)