Los combates entre el Ejército sirio y grupos rebeldes se han intensificado de nuevo este lunes en los Altos del Golán, en el área del paso de Quneitra, en la frontera entre Siria e Israel.
Los dos bandos pretenden hacerse con el control del paso fronterizo. Los rebeldes del Frente al Nusra, vinculado a Al Qaeda, arrebataron el control de la frontera en Quneitra al régimen sirio hace unos días, pero las fuerzas gubernamentales intentan ahora recuperarlo.
En la frontera, se oían esta mañana explosiones de granadas de mortero y tiroteos, según diversos testigos. Los rebeldes se encontraban a pocos metros de distancia de la valla fronteriza, donde también operaba un tanque de las fuerzas del régimen sirio, presidido por Bashar el Asad.
El Ejército israelí informó la víspera de que había derribado un avión no tripulado que entró en el espacio aéreo de Israel procedente de Siria. En un comunicado, los militares indicaron que el drone (avión no tripulado) fue derribado por un misil Patriot cerca del cruce de Quneitra.
En la zona fronteriza entre Siria e Israel patrulla la Fuerza de las Naciones Unidas de Observación de la Separación en los Altos del Golán (FNUOS), creada el 31 de mayo de 1974 para vigilar el cese al fuego acordado entre Israel y Siria tras la guerra de 1973. Israel ocupó una parte de los Altos del Golán -territorio sirio- en la guerra de 1967 y se la anexionó posteriormente. Desde que estalló la guerra en Siria hace tres años y medio, los israelíes han reforzado las defensas en la zona.
El jueves pasado, un contingente de 44 soldados de Fiji de la FNUOS fue capturado en el lado sirio de los Altos del Golán por rebeldes islamistas sirios. Los soldados aún están secuestrados. En cambio, los 72 cascos azules filipinos de la misma fuerza de la ONU que estaban atrapados en combates y rodeados por los rebeldes, la víspera pudieron ser evacuados.
