La policía chilena investiga la explosión la noche del martes de una bomba de ruido en la costeña ciudad de Viña del Mar que dejó un herido leve, un día después del peor atentado en el país en más de dos décadas.
El artefacto de expansión forzada, fabricado en base a una botella plástica, ácido muriático y papel aluminio, explotó en un contenedor de basura en el estacionamiento de un supermercado y dejó a una funcionaria de servicio con un trauma auditivo. «Esto solamente provoca ruido. No contiene esquirlas ni tampoco es expansivo. Resultó una persona lesionada, que traslado este tacho de basura y resultó con un trauma acústico leve», dijo el capitán Rodrigo Loyola al canal estatal de televisión TVN.
El lunes, una bomba estalló en una zona comercial junto al metro de la capital de Chile dejando 14 heridos, en la semana en que se conmemora el golpe que depuso en 1973 al socialista Salvador Allende y dio paso a la dictadura de Augusto Pinochet.
SANTIAGO (Reuters)