EE.UU. atacaría al Estado Islámico desde Turquía

Turquía se ha negado a intervenir en Kobane (frontera Siria-Turquía) para frenar el avance del Estado Islámico, tal como lo ha solicitado el pueblo kurdo. En cambio, han solicitado la intervención de Estados Unidos, a quien también pidieron atacar al Gobierno constitucional de Bashar Al Assad.

Turquía aprobó a Estados Unidos utilizar sus bases aéreas para combatir al autodenominado Estado Islámico (EI), incluida la de Incirlik (base militar estadounidense ubicada a ocho kilómetros al este de Adana, Turquía), aseguró este domingo un funcionario del Departamento de Defensa.

«Los detalles de la utilización (de las bases) están siendo elaborados», dijo un funcionario a la AFP que pidió mantener el anonimato. Este anuncio se lleva a cabo tras una serie de protestas del pueblo kurdo, que pidió al Gobierno de Turquía apoyarlo militarmente para frenar el avance del EI en Kobane.

Sin embargo, el Gobierno de Turquía se ha negado a actuar y en reiteradas ocasiones instaron a las fuerzas de EE.UU. a intervenir, pero además exigieron que ayudara a atacar al Gobierno constitucional de Bashar Al Assad en Siria.

El primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, aseguró que su nación reforzará las capacidades militares de Siria para convertirla en una «tercera fuerza entre Damasco y del EI».

No obstante, Turquía ha descartado que vaya a involucrarse en el conflicto con el envío de tropas terrestres para atacar al EI en Siria o Irak, sino que se amparan en las fuerzas injerencistas de EE.UU.

El Pentágono alega que los ataques aéreos que ha ejecutado contra Siria no son suficientes para frenar al EI, sino que insisten en penetrar esa nación soberana por la vía terrestre.

Estados Unidos mantiene unos un mil 500 efectivos en la base aérea de Incirlik, en el sur de Turquía.

El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, llamó a prevenir una «masacre» en la ciudad siria de Kobane, en el que las fuerzas kurdas oponen una firme resistencia al autodenominado «Estado Islámico».