El Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales, INETER, brindó un informe del comportamiento sísmico y climático en el país.
El terremoto de 7.3 en la escala de Richter registrado este lunes que se sintió en toda Centroamérica se debió al movimiento de las placas Coco y Caribe. Las autoridades registran réplicas menores de 5 grados y no descartan se produzcan algunas más fuertes.
«Nos parecen muy bajas y esperamos en los próximos días y semanas réplicas más fuertes todavía. Esas réplicas podrían tener magnitudes de 6 o inclusive más, pero no van a causar daños ni tsunamis. Hay una muy baja probabilidad inclusive para una réplica de magnitud 7», explicó Wilfred Strauss, director de Geofísica del INETER.
El Ineter explicó que el percibido no ha sido el terremoto más fuerte que se ha producido en esa zona del océano y por experiencias anteriores en su momento decretaron alerta de tsunami y actualmente están pendientes del comportamiento volcánico.
«En Nicaragua dos días después del terremoto del 2001 tuvimos pequeños sismos en el volcán Apoyeque, entonces con esta experiencia tenemos que estar preparados para actividad sísmica más pronunciada en El Salvador, en Nicaragua en la zona de los volcanes», dijo Strauss.
En cuanto al clima, la dirección de Meteorología, explicó que el sistema de baja presión que se mantiene en el pacífico se ha fortalecido por lo que se mantendrán las condiciones actuales, no así en la región del Caribe.
«Mucha humedad sobre toda la región del pacífico y por tanto precipitaciones que podrán andar de moderadas a incluso lluvias fuertes en zonas muy localizadas. Particular atención queremos brindar al occidente del pacífico (León y Chinandega) y al sur del pacífico (Granada, Rivas y Masaya)», detalló Marcio Baca, director de Meteorología.
Las autoridades explicaron que es probable que las condiciones actuales se mantengan el resto de esta semana, por lo que llaman a la población a tener cuidado al momento de cruzar ríos, quebradas y cauces.
Jimmy Altamirano Corrales
