Todo inicio la mañana del domingo cuando 16 jóvenes, entre las edades de 13 a 30 años, se enrumbaron hacia El Bálsamo, una zona recóndita ubicada sobre la carretera «Los Millonarios» al sur oeste del municipio de El Viejo, donde se supone explorarían sin ningún riesgo. Sin embargo, el panorama cambió drásticamente cuando en medio de la tormenta se desorientaron mientras buscaban el camino de regreso a casa.
Ante la angustia de los familiares por desconocer el paradero de sus seres queridos, vecinos salieron por sus propios medios a buscar a los 16 muchachos que no daban señales de vida. Entre el pánico de ser arrastrado por las corrientes o ser devorados por una bestia, Yader Francisco Yanes agradeció a Dios el haberlos regresado a todos con vida.
«Salimos a las 10 de la mañana del domingo en bicicleta, recorrimos dos horas sobre la carretera «los millonarios» en el camino nos detuvimos varias veces a garrobiar y nos bañamos en una posa, luego continuamos nuestro viaje hasta llegar a las dos de la tarde a la finca «La Pita» ahí dejamos las bicicletas y caminamos varios kilómetros para llegar a los manglare, pero minutos después, el cielo se oscureció y se dejó venir la lluvia con rayería, salimos como pudimos para evitar ser arrastrados por las corrientes pero terminamos perdidos cuando nos separamos», expresó.
«Fue una experiencia difícil para mí, sentí que moriría cuando bordeaba el estero, nadaba y me sujetaba del manglar pero al final logré salir temblando del frío y terminé desmayado» dijo Roberto Ruiz otro aventurero.
Al vernos perdidos solo nos quedó la alterativa de subir a una loma donde pasamos la noche bajo lluvia, aún despiertos, nos abrazamos porque moríamos de frío, recuerdo que Roberto se comió un pescado crudo y el resto jaiba mientras contábamos chiles para no entrar en pánico, así estuvimos hasta que salió el amanecer», narró Manuel Córdoba.
Las labores de búsqueda y rescate que iniciaron a las seis de la mañana del domingo finalizó con alegría a eso de las siete y media de la mañana del lunes, cuando familiares y vecinos encontraron a los primeros seis muchachos perdidos entre los cañaverales y horas después los otros 10 se vieron venir agrupados, sin energía y sucios, pero felices de ver a sus seres queridos quienes confiaron en Dios que los encontrarían con vida.
Los 16 Jóvenes fueron valorados en el lugar por paramédicos de los bomberos, dos fueron llevados al Hospital General España por problemas de hipotermia, presión y deshidratación; mientras que el resto resultaron con leves heridas en el cuerpo por el rose de las ramas y piedras, fueron trasladados a sus casas en los repartos España y David Andino en el municipio de Chinandega.
Belkiss Medina