Desde tempranas horas, los deudos se volcaron hasta los diferentes cementerios del departamento de Chinandega para rendir tributo a sus difuntos. Las flores, velas, rezos, y algunas comidas preferidas no faltaron para acompañar la festividad religiosa en la que recuerdan a sus seres queridos que partieron.
Así lo hizo Fidelina Díaz viuda de Ramos que llegó hasta el cementerio municipal de Chinandega para visitar el mausoleo de su hija Esperanza Ramos y esposo Ramón Ramos Tercereo que falleció hace un año. La muerte es más triste que el nacimiento de uno mismo porque es el final de la persona hoy hemos he venido con mis hijos y nietos a ponerle flores, rezar el novenario y recordar todos los momentos que vivimos y compartimos juntos durante 70 años de matrimonio.
«El 16 de Septiembre del 2013 fue el último día que vi a Ramón con vida y su partida dejó un gran vacío en nuestros corazones, aunque hoy es un día que recordamos a nuestros difuntos, siempre que puedo visito esta tumba donde esta él y mi hija», manifestó mientras observaba los retratos de sus seres que ya no están con ellos.
Otras familias llegaron desde horas tempranas de la mañana para pasar el día llevar las ofrendas y almorzar la comida que más le gustaba a sus difuntos.
Esperanza Narváez llegó con un ramo de flores hasta la tumba de su papa, a quien recuerda con nostalgia y extraña mucho. «Las flores son ofrendas que entregamos para demostrarle cariño y es una forma de decirles que aún los queremos y que los recordamos», expresó.
Seguridad en Campo Santo
Comerciantes de comida rápida instalaron sus negocios en la calle central del cementerio, donde la población aprovecho a comprar los tradicionales buñuelos de viento y yuca. Hasta el lugar se desplazaron efectivos de seguridad pública y de tránsito de la Policía Nacional Departamental y voluntarios de la Dirección General de Bomberos para garantizar la seguridad de los visitantes.
En tanto en las afueras del Campo Santo la venta de flores tuvo mucha demanda, los arreglos se ofrecían desde los 10 hasta los 75 córdobas, según el arreglo.
La afluencia de deudos ha sido más notoria por la tarde, pues muchos de ellos aprovecharan a participar en la homilía de las 5:00 pm que estará a cargo de monseñor Jaime Ramos vicario episcopal de la Iglesia de Santa Ana de Chinandega. Las autoridades calculan que más de 10 mil personas han llegado a este lugar a honrar a sus fieles difuntos.
Belkis Medina