En momentos que más estados aprueban el uso medicinal y recreativo de la marihuana en Estados Unidos, un minorista de cigarrillos electrónicos trata de establecer una franquicia nacional.
La disponibilidad legal cada vez mayor de la marihuana ha abierto la puerta para que Palm Beach Vapors, de Tulsa, Oklahoma, comercialice un método para producir un aceite esencial de cannabis que puede absorberse con un cigarrillo electrónico común, según su presidente ejecutivo y cofundador, Chip Paul.
«Es una ola en todo el país», dijo Paul, cuya compañía estudia patentar el método y ya ha firmado acuerdos de licencia en California y Colorado para lo que llama su M-System. Paul agregó que planea crear franquicias en otros estados.
El uso de la marihuana es ilegal en Oklahoma, pero se proyecta que el mercado de productos de cannabis aumente a medida que más estados lo legalizan. Los defensores de la marihuana planean una fuerte iniciativa de legalización en el 2016 en California, Arizona, Maine, Massachusetts y Nevada, según Ethan Nadelmann, director ejecutivo del grupo Drug Policy Alliance.
La cannabis tiene un historial de uso médico para tratar dolor o aliviar síntomas como la náusea y los vómitos en pacientes de quimioterapia y pacientes de sida. Paul planeas lanzar otra campaña de recolección de firmas en agosto de 2015.
Los cigarrillos electrónicos funcionan mediante el calentamiento de nicotina líquida, que convierte en un vapor inhalable.
La compañía ha solicitado una patente y espera que el M-System represente entre 30% y 40% de sus ingresos anuales para el 2018, suponiendo que el movimiento de legalización de la marihuana siga su paso, dijo Paul.
OKLAHOMA CITY, Oklahoma, EE.UU. (AP)