Miles de personas desde Los Angeles a Nueva York protestaron en paz aunque otras bloquearon el tráfico o chocaron con la policía al reaccionar con furia a la decisión de un jurado de instrucción de no formular cargos contra el policía blanco que mató a tiros a un joven negro desarmado en Ferguson, Missouri.
En todo el país hubo marchas con carteles y coros de «manos arriba. No disparen», la consigna que convoca a las protestas contra las muertes causadas por la policía. Los mayores disturbios se registraron en St. Louis y Oakland, California, donde los manifestantes invadieron autopistas para rodear los autos mientras alzaban las manos.
Grupos de entre algunas decenas y varios cientos de personas se concentraron en Chicago, Denver, Salt Lake City, Boston y Washington, donde la gente portando carteles con la leyenda «Justicia para Michael Brown» se congregó frente a la Casa Blanca.
El caso Ferguson, con fuertes matices raciales, ha generado tensiones y debates sobre las relaciones entre la comunidad y las fuerzas del orden en ciudades a cientos de kilómetros del suburbio con mayoría de población negra.
En Los Angeles, las manifestaciones fueron mayormente pacíficas con un breve bloqueo de la Ruta Interestatal 110, informó la prensa local. En Nueva York, la familia de Eric Garner, quien murió asfixiado al ser detenido por un policía meses atrás, se unió al reverendo Al Sharpton, quien deploró la decisión del jurado en Ferguson en un discurso en Harlem.
Cientos de personas marcharon del sur de Manhattan a Times Square, en pleno centro. Los manifestantes bloquearon brevemente varios puentes.
FERGUSON, Missouri, EE.UU. (AP)
