Roberto Gómez Bolaños, a través de Chespirito, dejó un legado enorme de risas y recuerdos alegres para muchas generaciones, logrando con su simpatía y versatilidad sacar más de una carcajada en pequeños y grandes, y seguramente seguirá haciéndolo hasta la posteridad.
El recuerdo que queda de este gran comediante no sólo va permanecer alojado en el corazón de los mexicanos, sino que su humor y alegría se extiende por toda Latinoamérica, razón suficiente por la que el luto y la tristeza se siente al momento de saber de su deceso, de su paso a mejor vida.
Para Nicaragua sus aventuras han marcado también a muchos niños y adultos, e incluso el comediante mandó un tweet de «Feliz Navidad, Nicaragua» para el año pasado.
Acá les dejamos una recopilación sobre las más célebres frases de Chespirito, como una forma de hacer un pequeño homenaje a este gran hombre:
1. Fue sin querer queriendo… o así decía el Chavo del 8 cada vez que lo regañaban.
2. Se me chispoteó… Es un verbo que no reconoce la Real Academia de la Lengua Española pero que el mismo Roberto Gómez Bolaños incluyó en el lenguaje de los mexicanos cada vez que dicen algo inoportuno, tal como era el Chavo del 8.
3. Para qué te digo que no si sí. Si Cantinflas puso un estilo de hablar enredado y sin sentido, Chespirito lo plasmó en las frases de algunos de sus personajes como la Chimoltrufia y el Chómpiras.
4. «Popularidad es el número de personas que te conocen y te siguen y van a ver tus cosas y Cantinflas no estuvo en la televisión y por tanto ni de casualidad se me puede acercar», dijo Gómez Bolaños en 2003 al considerarse más grande que el llamado Mimo de México.
5. Más rápido que una tortuga, más fuerte que un ratón, más noble que una lechuga, su escudo es un corazón. Así comenzaba el programa del Chapulín Colorado, el «superhéroe» más famoso de la televisión mexicana.
6. ¡Síganme los buenos! En la década de 1970 no existía todavía el Twitter pero el Chapulín Colorado ya le pedía a los televidentes que lo siguieran, pero solo los que fueran buenos como él porque en sus aventuras el bien siempre ganaba.
7. No contaban con mi astucia. Aunque era torpe al actuar, el Chapulín Colorado terminaba por vencer a los villanos y al salirse con la suya remataba con esa frase.
8. Que no panda el cúnico. Y si a Chespirito era experto para poner a cantinflear a sus personajes, porqué no jugar con las palabras como lo hacía con el Chapulín.
9. Silencio, mis antenitas de vinil están detectando la presencia del enemigo. No solo la astucia era el arma del Chapulín Colorado sino sus antenitas que servían como sensores y se movían de una manera peculiar.
10. ¿Sabías que la gente sigue diciendo que tú y yo estamos locos? Tantos personajes pudieron volver loco a Roberto Gómez Bolaños que era algo parecido al cenzontle o pájaro de las mil voces pero los únicos locos eran los Chifladitos: Lucas Tañeda y Chaparrón Bonaparte, que hacían reír por sus sketches sin sentido.
AGENCIAS