El fallo judicial es esperado no solo por los seguidores del renunciante exmandatario sino por sus adversarios, que desean «verlo morir en la cárcel».
El expresidente egipcio Hosni Mubarak llegó este sábado al tribunal para escuchar el veredicto del juicio por la muerte de más de 800 manifestantes que demandaban su renuncia a principios de 2011.
Mubarak, de 86 años, fue trasladado en helicóptero del hospital militar de El Cairo, donde se encuentra encarcelado, hasta el tribunal, situado en una academia policial de la capital egipcia.
También es acusado en otros procesos de corrupción administrativa y apropiación de fondos del Estado, junto a sus hijos Gamal y Alaa.
Unos cinco mil policías fueron movilizados en torno al tribunal, indicó la agencia de prensa oficial MENA.
El veredicto estaba previsto para el 27 de septiembre pasado, pero el juez lo había aplazado aduciendo que no había tenido el tiempo suficiente para leer las dos mil páginas del expediente.
Mubarak había sido condenado en junio de 2012 a cadena perpetua, pero la sentencia había sido anulada por razones técnicas, lo que llevó a la celebración de un nuevo juicio.