El mejor Lionel Messi volvió a aparecer el domingo con un triplete y dos nuevas marcas para el libreto histórico del Barcelona, que venció 5-1 al Espanyol en el clásico ciudadano y sigue segundo clasificado en la liga española.
Sergio García adelantó a los «periquitos» a los 13 minutos, pero Messi niveló con un golazo a los 45 y desequilibró con otros dos a los 50 y 81 para convertirse en el primer futbolista en alcanzar la cifra de 400 goles como azulgrana, llegando a los 402 entre partidos oficiales y amistosos.
Con sus tres dianas, el astro argentino también superó las 11 de César Rodríguez como máximo realizador de los derbis y acumula 12 frente al Espanyol, que sigue sin ganar fuera de casa.
«El primer gol de Leo ha sido un golpe. No supimos olvidar el mazazo y nos costó el partido. Messi va a ser una leyenda del fútbol y es un lujo para el Barsa», consideró tras la derrota el técnico españolista, Sergio González.
Los blanquiazules también encajaron otros dos tantos de Gerard Piqué (53) y Pedro Rodríguez (77) y marchan 12dos en la clasificación que sigue comandando el Real Madrid con 36 puntos tras vencer el sábado por 3-0 al Celta de Vigo, también con triplete de Cristiano Ronaldo.
El portugués figura como máximo cañonero del torneo con 23 conquistas por la 14ta fecha, mientras que Messi acumula 13.
«No sé si se retroalimentan con Cristiano», dijo el técnico barcelonista, Luis Enrique. «Nos interesa que Leo aporte lo máximo al equipo y tiene máxima implicación, marcando, asistiendo e incluso en defensa.
Uno se acostumbra muy rápido a tener jugadores desequilibrantes».
El Atlético también ganó 2-0 al Elche el sábado y es tercero con 32 unidades por las 34 que suma el Barsa como escolta del Madrid.
Los tres de arriba juegan la Liga de Campeones entre semana: el martes, el Madrid recibe al Ludogorets y el Atlético visita a la Juventus, mientras que el Barsa será anfitrión del Paris Saint Germain el miércoles.
En cotejo posterior, el Villarreal goleó 4-0 a la Real Sociedad con tantos de Bruno Soriano (63), Denis Cheryshev (73) y Moi Gómez (80 y 86) igualando los 24 puntos del Málaga y del cuarto clasificado Valencia, que cierra la jornada dominical ante el Granada.
En el partido de la mañana, el colombiano Carlos Bacca anotó su 10mo gol del torneo y el tanto le valió al Sevilla su cuarta victoria fuera de casa, 1-0 en cancha del Rayo Vallecano.
Los tres puntos cosechados dejan con 29 en la tabla de posiciones al equipo andaluz, buenos para mantener la cuarta posición que da boleto a jugar la próxima Liga de Campeones.
Bacca marcó a los ocho minutos y el Rayo fue incapaz de revertir el marcador, truncando una racha de dos victorias seguidas y quedando anclado en el 10mo lugar.
«Los delanteros siempre hablamos con goles», comentó tras la victoria Bacca.
La jornada se completa con los cruces Villarreal-Real Sociedad y Granada-Valencia.
El Barsa sufrió en la primera mitad ante un Espanyol que jugó con maestría y se puso en ventaja cuando el ecuatoriano Felipe Caicedo robó un balón a Sergio Busquets en el mediocampo y profundizó para García, quien se aventuró frente a Piqué y, aprovechando el espacio creado por el latinoamericano, quebró al central y batió a Claudio Bravo de tiro raso.
El arquero chileno mantuvo a distancia a los azulgranas con buenas intervenciones ante García y luego Víctor Sánchez, llegado en escapada, mientras el Barsa tardó en entrar en calor, y solo al final del primer periodo logró derribar el muro de contención blanquiazul.
Fue como casi siempre Messi, quien ya había avisado con un tiro libre directo al travesaño y, tras recibir un pase atrás de Xavi Hernández, ajustó el punto de mira desde la media luna y superó la estirada de Kiko Casilla con un zurdazo ajustado al poste.
Subido el empate, el Barsa jugó más gusto, a pesar de que el Espanyol seguía regalando las bandas con la consigna de tapar los pasillos centrales.
Pero el cerrojo no contemplaba arrancadas como la que se marcó Neymar por la derecha, desequilibrando la defensa por el flanco donde Suárez cruzó para Messi, letal en su toque de zurda y disparo raudo con la diestra, imposible para el arquero.
El tercero fue pecado de juventud del zaguero Eric Bailly al tiempo que compensación de Piqué, poderoso en el cabezazo a la red tras tiro de esquina lanzado por Ivan Rakitic.
En plena bajada de brazos españolista, Rodríguez subió el cuarto tras un pelotazo de Jordi Alba y Messi cerró su festín particular al cruzar nuevamente de diestras un servicio del extremo.