En el pequeño cementerio de la isla de Ometepe, desconocidos profanaron una tumba, llevándose el cráneo del difunto quien ya tenía veinte meses de fallecido. Familiares creen que se trata de un posible hechizo que les quieren causar enemigos.
La Policía Nacional se hizo presente hasta el lugar de los hechos y se encuentran tras la pista de los mal hechores en este horrendo caso que tiene conmovida a la población.
La profanación de la tumba fue descubierta por un campesino que reparaba la cerca de la propiedad que se encuentra contiguo al cementerio y fue quien dio aviso a los familiares.
En lo que va del año ya van dos profanaciones en la isla de Ometepe, ocurriendo uno en el cementerio de Altagracia y este último en la comunidad de San Ramón a unos 25 kilómetros del casco urbano.
Alvaro Álvarez